Insisto en lo preocupante que ha sido el caso de la puñalada trapera a Ignacio González. Dejando a un lado el hedor que provoca el caso del ático de Estepona, resulta inaudito ver informaciones como la que publicó EL PAÍS en la que se dice que el informe policial del caso fue robado misteriosamente de la comisaría de Marbella.
Información del EL PAÍS
La investigación policial del ático de Ignacio González ha pasado por varias fases y le costó el cargo al primer comisario general de Policía Judicial que nombró el PP.
- Julio de 2011. El entonces jefe de la comisaría de Marbella, Hermes de Dios Herrero, fue citado en Madrid por quien era director adjunto operativo de la Policía, Miguel Ángel Fernández Chico, quien le encargó que "dentro del más absoluto secreto y discreción" investigase quién era el dueño real del famoso ático. Estaba presente el comisario José Villarejo.
- Noviembre de 2011. Villarejo se reúne con Ignacio González en una cafetería de Madrid junto a otro comisario para hablar sobre el ático.
- Marzo de 2012. Hermes de Dios escribe que ha cerrado la pesquisa "al no encontrarse indicios de delito".
- Abril de 2012. El ministro del Interior, Jorge Fernández, aseguró que la investigación abierta a González había sido "ilegal" y que había sido ejecutada "al margen de los protocolos establecidos" y anunció la apertura de un expediente.
- Junio de 2012. El comisario general de Policía Judicial, Enrique Rodríguez Ulla, ordena la apertura de una investigación oficial y secreta sobre el ático. Lo hizo un mes después de que el Sindicato Unificado de Policía (SUP) amenazara con llevarle a los tribunales si no lo hacía. El 3 de julio Ulla es destituido, días después de que la Fiscalía Anticorrupción archivara el caso del ático.
- Marzo de 2015. González denuncia públicamente a José Villarejo por presunto chantaje en la antedicha reunión y este se querella contra aquel por injurias
Queda claro que en este país existe un hampa policial que rinde cuentas muy por encima del Director de la Policía Nacional y del Ministro de Interior. Se mueven como pez en el agua en asuntos escabrosos y lo hacen con total impunidad. Federico Jiménez Losantos anunció el lunes que recibió varias llamadas del Comisario Villarejo a fin de amedrentarle por incidir en este tema. Obviando diferencias políticas con el director de Libertad Digital, me parece deplorable que las altas esferas del Gobierno permitan la actuación de esta camorra hispana que exhibe y filtra trapos sucios de cualquier ciudadano a beneficio propio. Si le hacen esta putada a uno de los suyos para quitárselo de en medio, qué no harán con los adversarios políticos. Así aterriza la sonrisa de Cifuentes en los carteles electorales.
Y para compensar la jugada mafiosa, el inefable Mariano ha colocado a Esperanza Aguirre como futurible alcaldesa de la capital. Una de cal y otra de arena. No quiere líos en el PP de Madrid tras ver en la acera de enfrente a Pedro Sánchez acorralado por los suyos. Una decisión un tanto arriesgada ya que la lideresa ha esquivado por muy poco la porquería emanada del caso Púnica. No así sus colaboradores, de todos sabido que varios duermen con pijama de rayas actualmente. Ella insiste en que no sabía nada, pero en el futuro bastará con que alguno se canse de la comida carcelaria para que cante como un papagayo e implique a la Margaret Thatcher española.
De momento el ala dura del PP, es decir, los neoliberales con menos escrúpulos y con más ganas de privatizar, se frotan las manos con la idea de crear un corral madrileño para albergar a todos los amiguetes empresarios, intermediarios, conseguidores y demás jauría depredadora, y así, finiquitar por fin el sistema público de sanidad y educación.
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